El triste desenlace que tuvo la Sele ayer en East Rutherford, New Jersey ya se veía venir, su accionar durante la Copa de Oro 2011 fue bastante malita excluyendo lo hecho ante Cuba en el Cowboys Stadium de Arlington, Dallas.
Una selección sin nada de de amor por la camiseta, falta de liderazgo y una gigante inmadurez, fueron factores de peso para cambiar las maletas llenas de sueños por desilución y fracaso, como ya es una costumbres en este tipo de competencias.
La humillación que nos dio México en el Soldier Field, golpeó totalmente la moral (si es que en algun momento la tuvieron) de los seleccionados al punto de que no pudieron cambiar el cassette y no hubo ninguna mejoría ni tampoco se corregieron los horrores que se hicieron ante los aztecas.
Los jugadores no llenaron las expectativas y la lesión de Bryan Ruíz y los malos plantamientos de LaVolpe ante El Salvador y México fueron fiel reflejo de una crónica de una muerte muy anunciada, ya que las esperanzas de la Sele estaban puestas en el jugador del Twente de Holanda.
Otra vez la historia se repite, se fracasó en la Copa Centraomericana de Naciones 2011 y se fracasó en la Copa de Oro 2011, los resultados no se dieron y el grupo que nos tocó que se veía por poco se convirtió en un queque con hormigas por el empate ante El Salvador y la inesperada goleada ante los mexicanos.
Solo se ganó un partido en todo el certamen, otra vez iniciamos un proceso con el pie izquierdo y como dice la frase lo que mal comienza y mal termina, ojalá que por el bien de todos esa frase no se cumpla con el proceso, con LaVolpe y con la Sele.
0 comentarios:
Publicar un comentario