Con la pandemia de Covid-19 y con la ola de violencia que actualmente atraviesa el país, posiblemente algunos han eliminado las cuentas de noticieros en redes sociales y han filtrado sus newsfeed con sus intereses y pasatiempos, pero desgraciadamente los males que nos aquejan ahora son parte nuestros gustos y preferencias.
Ayer en redes sociales se viralizó un video de un intercambio de golpes durante un partido de Divisiones Menores en nuestro país, en cuestión de instantes adultos y menores convirtieron el terreno de juego y también las graderías en un ring boxeo acompañado de balazos en el medio del caos y el desorden.
Si bien es cierto esto posiblemente sea pan nuestro de cada día los fines de semana en la mañana, el altercado registrado este sábado en la cancha de Mata de Platano durante el duelo Fútbol Consultants Guadalupe y Academia San Migool por el Torneo Interfiliales 2023 deja claro que la situación de violencia en Costa Rica se propagó en todos los rincones del país, en todas las edades y todos los ambitos posibles.
Desde antes de la pandemia por Coronavirus eso de "Pura Vida" ya había pasado de ser nuestro dicho más representativo a un recuerdo y desde la pandemia es solo una anécdota, sin necesidad de seguir cuentas de noticias o salir a la calle, basta con solo abrir el chat de cualquier grupo de Whatsapp para darse cuenta que hay una crisis en el manejo de emociones, que si no ponemos todos de nuestra parte esto puede empeorar más.
Sin importar el contexto, sin importar que provocó el problema, da vergüenza ajena ver como 2 señoras se dan de manazos a vista y paciencia de todo el mundo y la hecatombe, la debacle final, como si se tratara de Deportes en el Recuerdo, menores de edad dandose de manazos con mayores de edad, mayores de edad dandose manazos con menores de edad, sin ningún pudor, sin ninguna pena, porque si estos equipos volvieran a jugar hoy y vuelve a ocurrir los mismos problemas que causaron ese pleito, se vuelven a dar de golpes otra vez.
Nuestro país está irreconocible de la cordialidad de la cual sacábamos pecho pasamos un país de gente fria, cortante, totalmente individualista, poco solidaria y ahora bajamos la cabeza de la pena, Costa Rica es noticia en el mundo porque a pesar de ser casi que el único país del planeta sin Fuerzas Armadas hay un derramamiento de sangre sin precedentes en la historia, al 12 de abril se han registrado 241 homicidios en el presente año y porque los propios padres de jugadores de un partido de menores de 15 años hicieron un pleito en las graderias.
Muchos asocian esta ola de violencia en Costa Rica "porque los profesores son unos vagos", "por el reggaetton y las narconovelas que pasaron en su momento por televisión nacional o por las malas influencias", pero el reggaeton, las narconovelas ni mucho menos los profesores de las escuelas o colegios tienen la culpa que de que 2 madres de familia o menores y mayores de edad se dieran de manazos en una cancha o que nos estemos matando entre nosotros, todo se debe a que en el país se perdió el temor a la autoridad y el amor hacia los demás, hoy en día vemos a la autoridad como un enemigo del país y solo nos importa por donde vamos caminando, es nada mas de volver a ver en las calles el semblante de un montón de gente que toman sus vehiculos después de ver la vida de perfecta de conocidos y familiares en historias de Instagram, de gente que muy probablemente anda un palo de hierro o la famosa "panta de chancho" en la joroba, ni que decir del otro montón de gente conduciendo observando el celular, porque nos importa un pepino la vida de los demás.
¿Cuál es la gran desgracia que tiene que ocurrir en Costa Rica para que los ticos hagamos consciencia y tomemos un minuto para reflexionar el rol que debemos asumir - no para volver a los tiempos de antes - si no para intentar de contener en la medida de la posible esa odio, esa indiferencia hacia las persona y la mala vida que nos estamos llevando? Volver a la paz, la simpatía, la empatía y el respeto hacia los demás que nos diferenció en su momento es como acabar con la hambruna en África, pero está en cada uno de nosotros y de las autoridades tomar con valor las riendas de la situación para que esta situación no se salga de control.
No espere a que Cruz Roja, Fuerza Publica u 911 lo llame a su casa para decirle que un familiar o ser querido está tendido en la calle con un balazo en la cabeza, no espere a que Cruz Roja, Fuerza Publica o 911 lo llamen a su casa para avisarle que un familiar o ser querido fue responsable de un accidente de transito por conducir ebrio o por estar viendo el celular, no espere 8 balazos al aire para calmarse en un pleito de un partido de jugadores menores de 15 años ¿se imagina estar acostado o estar ahi en su casa todo relax en la casa y lo llamen a uno con esa noticia?, 241 familias ya pasaron por eso este año, que la siguiente no sea la suya.
Respetemos a las autoridades y quitémonos la vista de caballo, tengamos más empatía con nuestro prójimo.
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